El uso de tecnología ha aumentado vertiginosamente en las operaciones de las empresas de utilities y telecomunicaciones, desencadenando un boom en la generación de datos. Esta situación ha puesto en jaque a las organizaciones, ya que la mayoría no cuentan con soluciones tecnológicas que les ayuden a manejar esta información y lograr obtener beneficios para optimización de procesos y el mejoramiento de la toma de decisiones para su compañía.
En la era digital, los procesos de toma de decisiones se han acelerado y la cantidad de información sobre la cual basar dichas decisiones puede llegar a ser abrumadora. Para minimizar esta situación y sacarle provecho a los datos generados, las empresas de utilities y telecomunicaciones han empezado a implementar soluciones de software que incluyen herramientas como las analíticas, las cuales facilitan la administración de la información, con el objetivo de construir una ventaja competitiva en términos de los servicios que se le ofrecen al cliente.
Queda claro, entonces, que el uso de analíticas se ha convertido en una tendencia que se mantendrá al menos en el futuro cercano. Ahora bien, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de analíticas? ¿A qué se le puede atribuir su amplia acogida en las industrias de telecomunicaciones y utilities?
Las analíticas hacen referencia al análisis y manipulación de datos estadísticos y matemáticos; de manera general, se pueden definir como un amplio grupo de sistemas, herramientas y capacidades que contribuyen a la toma de decisiones y la ejecución de acciones; son empleadas para agrupar, segmentar y calificar datos, así como para predecir posibles escenarios. Esas características llevan a que con frecuencia se aluda a las analíticas como la ciencia del análisis y el descubrimiento.
Existen cuatro tipos de analíticas: descriptivas, de diagnóstico, predictivas y prescriptivas. Las analíticas descriptivas son las más comunes, permiten ver de manera resumida qué está sucediendo al interior de los procesos de negocio. Por otro lado, las de diagnóstico, sirven para descubrir las causas de un problema y aislar las mismas. A su vez, las predictivas establecen la probabilidad de ocurrencia de un evento o las estimaciones de una variable cuantificable en un punto dado en el tiempo y finalmente, las analíticas prescriptivas hacen uso de toda la información anterior para determinar cuáles son las mejores acciones que se deberían ejecutar y muestra cuáles son las posibles consecuencias de dichas acciones.
En general, las analíticas ayudan a procesar grandes cantidades de datos con el objetivo de identificar patrones de comportamiento y brindar información sobre el estado de los diferentes procesos de negocio. Tanto para las empresas de servicios públicos como para las de telecomunicaciones, el uso de analíticas puede traducirse en beneficios en términos de compromiso con el cliente, reducción de costos y confiabilidad del servicio, entre otros aspectos.
Por ejemplo, las analíticas pueden ayudar a identificar los patrones de uso de los servicios por parte de los clientes, de manera que la compañía pueda usar esa información para crear nuevas ofertas de servicio que se ajusten mejor a las necesidades del usuario. De igual forma, el uso de estas herramientas ayuda a las empresas a reducir costos al contribuir al mejoramiento de las operaciones y permitir la identificación de riesgos de manera más efectiva. Finalmente, las analíticas pueden ayudar a aumentar los niveles de confiabilidad del servicio al brindar predicciones sobre cuándo reemplazar equipos en mal estado lo que ayuda a prevenir suspensiones del servicio.
Al invertir en soluciones tecnológicas que incluyan herramientas como las analíticas, las empresas de servicios públicos y de telecomunicaciones podrán obtener datos objetivos de forma oportuna, que les permitan tomar decisiones acertadas para optimizar los procesos de negocio, incrementar la satisfacción del cliente y mejorar las ofertas comerciales que se les presentan a los usuarios.